Estado actual y perspectivas del ordenamiento territorial en América Latina, Aguascalientes (México)

Entre el 5 y el 7 de septiembre de 2012 se realizó el Congreso Internacional de Urbanismo, organizado por la Universidad de Autónoma de Aguascalientes (México) sobre el tema “Intervención del territorio bajo una perspectiva sustentable”. El día 6 el Dr. Ángel Massiris Cabeza impartió la conferencia titulada “El ordenamiento territorial en América latina. Estado actual y perspectivas”, en la cual examinó las distintas políticas territoriales que han aplicado los países latinoamericanos en los últimos 70 años, con especial énfasis en las políticas de ordenamiento territorial. Sobre esta última presentó tablas analíticas y síntesis sobre los avances en materias conceptuales, legales e instrumentales, concluyendo que ha habido importantes avances en estos asuntos pero escasos progresos en la solución de los conflictos por usos y ocupación del territorio.

Demostró con datos como persisten los problemas urbanos: ciudades fragmentadas, caóticas, dispersas, congestionadas y ambientalmente insostenibles que favorecen la segregación, cambios no regulados de uso del suelo, urbanización intensa en asentamientos no planificados; Igualmente persisten y se agravan los problemas ambientales: erosión y pérdida de fertilidad de los suelos, desertificación, deforestación, degradación de pastizales, salinización y alcalinización de suelos bajo riego, subutilización de tierras agrícolas de buena calidad, alteración del funcionamiento de cuencas hídricas y pérdida de biodiversidad; también persiste y se agrava la ocurrencia de desastres por la inadecuada ubicación de viviendas y las vulnerabilidades de los grupos sociales pobres.

Frente a tales problemas, el Dr. Massiris dio a conocer un conjunto de factores que explican el por qué, a pesar de que el ordenamiento territorial es una herramienta poderosa para orientar el uso sostenible de los recursos naturales y la localización adecuada de la población, actividades económicas e infraestructuras; sin embargo, no ha tenido el éxito esperado. Los factores tiene que ver con el contexto socio político y socio económico bajo el cual se han implementados las políticas y planes de ordenación. Tal situación lleva al Dr. Massiris a proponer cambios en las actuales políticas de desarrollo, en las formas de gobierno y en la concepción misma del ordenamiento territorial. Tales cambios se expresan en el desarrollo territorial sostenible, idea bajo la cual el ordenamiento territorial trascendería el concepto pasivo y subordinado a las acciones sectoriales para convertirse  en un concepto activo y transformador de los territorios.

El Dr. Massiris finalizó su exposición con la siguiente reflexión que se publica textualmente:

“El modelo de desarrollo que domina hoy en la mayoría de países latinoamericanos no ha logrado resolver los problemas sociales, económicos, ambientales y territoriales existentes en dichos países. Tal situación llevó a Osvaldo Sunkel a plantear la disyuntiva que enfrenta la región: la de seguir dilapidando su riqueza natural excepcional (agua, tierras cultivables, bosques y biodiversidad) en nombre de las ventajas comparativas o competitivas y en beneficio de minorías privilegiadas, o valorizar su patrimonio natural en un mundo de creciente escasez de recursos hídricos, suelos fértiles, biomasa, bosques, flora, fauna y biodiversidad (Sunkel, 2001). En este contexto adquieren importancia las nuevas visiones y estrategias de desarrollo que se están construyendo en algunos países de América Latina, entre los que se destacan Ecuador, Uruguay, Bolivia, Venezuela, Argentina, Nicaragua y Brasil. De lo que se trata es de lograr un nuevo orden social y territorialmente justo, ambientalmente sostenible, regionalmente equilibrado y culturalmente respetuoso de las diferencias, en el que la justicia social, la cohesión territorial, la gobernanza democrática, el derecho a una vida larga y saludable de todos los seres vivos, el uso y ocupación sostenible del territorio y la recuperación de los valores culturales que dignifican al ser humano, tales como la solidaridad, cooperación, honestidad, bien común y justicia, prevalezcan sobre el productivismo, el utilitarismo, el eficientismo, la competencia, el individualismo y la destrucción de las condiciones ambientales que hacen posible la vida y el Buen Vivir. El ordenamiento territorial, es sin duda una potente herramienta de planificación para lograr este nuevo orden territorial. He allí el gran desafío que tenemos en América Latina y particularmente la sociedad mexicana con el futuro de su territorio”.

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